El cuadro eléctrico es la pieza principal de una instalación eléctrica, pues en él confluyen todos los cables que llevan la energía a la vivienda. Actúa como un sistema de defensa, que se encarga de organizar y distribuir el sistema eléctrico, protegiendo todos los circuitos en los que se divide la instalación y, por ende, a los aparatos que están conectados a la red y a las personas que los manipulan. No en vano su nombre completo es Cuadro General de Mando y Protección.
Lo habitual es que existe un cuadro principal por vivienda. En el caso de grandes comercios y naves industriales, pueden instalarse uno o más cuadros secundarios, que se alimentarán del cuadro principal.
En realidad, tanto la apariencia como el funcionamiento del cuadro eléctrico son muy sencillos. Sin embargo, conviene conocer la función exacta de sus componentes para saber cómo actuar en caso de un corte de luz o sobrecarga del sistema.
Partes de un cuadro eléctrico
ICP (Interruptor de Control de Potencia)
El ICP es el primer interruptor que encontramos dentro de la caja. En ocasiones, especialmente si la instalación es antigua, puede estar separado del resto de interruptores, con su propia tapa y precintado para evitar la manipulación por parte de los usuarios. Y es que este dispositivo es el encargado de cortar el suministro de entrada de energía si por cualquier motivo se supera la potencia contratada con la compañía eléctrica. Es un elemento de uso obligatorio y debe ser instalado por un electricista autorizado y capacitado para ello, pues su mal funcionamiento puede ser penalizado por la empresa eléctrica.
Este interruptor sirve también para evitar daños en el propio sistema eléctrico, pues protege la instalación cortando la corriente en caso de sobrecarga o de un cortocircuito, que debe ser arreglado por un especialista como los electricistas de Villaverde.
IGA (Interruptor General Automático)
El IGA es un mecanismo presente en los cuadros eléctricos más modernos. Su función principal es proteger la instalación eléctrica, evitando que la potencia supere el máximo que esta puede soportar. Es decir, aunque hayáis contratado un plan con una gran potencia, si la instalación eléctrica del inmueble no tolera esa carga, el IGA se desconectará, previniendo así sobrecargas y cortocircuitos.
PCS (Protector Contra Sobretensiones)
Ya el nombre nos da una idea clara de su función. Al igual que el IGA, es un interruptor de reciente incorporación, que evita que los aparatos eléctricos sufran daños por una sobretensión.
El PCS actúa como un escudo, desviando la corriente hacia la toma de tierra, para evitar la sobrecarga de los dispositivos conectados.
ID (Interruptor Diferencial)
El ID está presente tanto en los sistemas modernos como en los antiguos. Es fácil de identificar, pues por lo general tiene una palanca giratoria o un pulsador.
Este mecanismo se desconecta rápidamente cuando se produce una fuga de tierra, es decir, cuando por cualquier causa la circulación de corriente se produce fuera de los conductores en una instalación eléctrica. La fuga de tierra puede originarse por algún defecto de la instalación o de algún aparato eléctrico conectado a la red. Ante esta situación, el ID desconecta el sistema y protege de una descarga eléctrica a la persona que entre en contacto con un aparato defectuoso .
PIAS (Pequeños Interruptores Automáticos)
Conocidos coloquialmente como magnetos, son los interruptores que controlan por separado la llegada de electricidad a los diferentes electrodomésticos y circuitos de la casa: iluminación, enchufes, calefacción, etc.
Se desconectan automáticamente en caso de ser necesario. Por ejemplo, si detectan un exceso de consumo en una parte de la vivienda, el interruptor específico saltará, dejando sin electricidad esa zona, pero no el resto del inmueble.
También puede desconectarse de forma manual en caso de cortocircuito o sobrecarga, afectando de manera individual a los aparatos que dependen de ellos.
Seguro que tras este breve repaso por los componentes del cuadro eléctrico, os sentís un poco más tranquilos acerca de la seguridad del sistema eléctrico de vuestra casa. Sin embargo, aún deberéis estar atentos a cualquier anomalía y evitar manipular el cuadro sin la supervisión de un electricista cualificado.
¿Qué hacer si salta el diferencial del cuadro eléctrico?
No es de extrañar que alguna vez os haya saltado el diferencial del cuadro eléctrico. Lo más probable es que no hayáis sabido qué hacer. Es por eso que os daremos una sencilla guía que os permitirá atender esta situación.
Lo primero es localizar el diferencial en el cuadro eléctrico. Por lo general este botón suele tener una letra T o un color diferente al resto de interruptores del cuadro eléctrico.
Una vez ubicado, comprobamos que efectivamente esté bajado, y procedemos a desconectar los demás interruptores.
A continuación, debemos levantar el diferencial de forma individual. Si al pulsar el botón este vuelve a saltar, estará bien, pero si no lo hace, la avería podría venir de los fusibles.
Tras esta comprobación tendremos que levantar nuevamente el diferencial y probar, uno por uno, los magnetotérmicos, es decir, el resto de partes del cuadro eléctrico. El que haga saltar el diferencial es el que estará averiado.
Esto puede ocurrir por algún enchufe o electrodoméstico defectuoso, y en ese caso, habrá que reparar o sustituir el elemento dañado.
Si aún con esta explicación no os sentís confiados de atender el fallo vosotros mismos, es preferible que contactéis a un electricista especializado en cuadros eléctricos, quien podrá solucionar rápidamente el problema e incluso detectar si la avería requiere que contratéis un aumento de potencia.
